Es la acumulación de pus en el espacio que se encuentra entre el pulmón y la superficie interna de la pared torácica (espacio pleural).
Generalmente causado por una infección que se disemina desde el pulmón iniciando como derrame pleural y que al infectarse lleva a una acumulación de pus en el espacio pleural. Puede llegar a ocupar todo el espacio u organizarse como varias bolsas de pus, ejerciendo una presión en los pulmones mientras la cantidad de liquido aumenta, que origina dolor y dificultad para respirar, producción de toxinas que pueden llevar a dañar varios órganos (hígado, riñones, corazón, aparato circulatorio, alteración del estado de alerta, etc)
Los factores de riesgo incluyen:
– Neumonía bacteriana
– Tuberculosis.
– Derrame pleural de otro origen.
– Procedimientos previos que ingresen a espacio pleural.
– Absceso pulmonar.
– Traumatismo o lesión del tórax (contusión pulmonar, hemotórax)
– Tumores malignos.
Los síntomas del empiema pueden incluir cualquiera de los siguientes:
– Dolor torácico que empeora cuando usted inhala profundamente (pleuresía)
– Tos seca o con flemas amarillentas.
– Sudoración excesiva, especialmente sudores fríos.
– Fiebre y escalofrío.
– Molestia general, inquietud o indisposición, debilidad generalizada.
– Dificultad respiratoria.
– Pérdida de peso (involuntaria)
Continúo a su servicio, para definir el tipo de tratamiento idóneo para cada paciente.